Cómo solucionar problemas laborales

Los problemas laborales son inherentes a cualquier empleado/a. Todos hemos pasado por algún desencuentro con el jefe, por sentir la envidia de los compañeros, el estrés laboral o no tener ganas de seguir evolucionando como profesionales.

Sin embargo, no hay que resignarse, ya que es posible cambiar la situación. Las constelaciones familiares sistémicas son un recurso de enorme eficacia para superar cualquier incidencia y recuperar el interés por seguir superándose día a día.

¿Problemas familiares?

Aunque intentemos separar nuestra vida personal de la laboral resulta muy complicado. Nuestra forma de ver el mundo, nuestros valores, nuestra interpretación de cuáles deberían ser nuestros objetivos profesionales y, en definitiva, nuestra vida está marcada directamente por cómo nos educaron nuestros padres. A su vez, ellos son la herencia directa de nuestros abuelos y estos de nuestros bisabuelos.

Las constelaciones familiares sistémicas son un tipo de terapia emocional que se realiza en grupo. El objetivo es analizar cuál es el patrón de pensamiento de la familia y a partir de ahí detectar los posibles conflictos heredados. En ocasiones, los malos hábitos, el pesimismo y otras dolencias psiquiátricas se desarrollan de forma implícita para sentirse más integrado/a en la familia. En el caso de los conflictos laborales es habitual adoptar diversos roles.

Todo puede estar provocado por un problema que recuerda a la infancia (papel de niño/a) o que exige perfeccionismo (padre o madre). El resultado de la terapia debe ser la consecución de la madurez emocional y personal.

A partir del cambio en la forma de pensar será más fácil relacionarse con los compañeros, entender el punto de vista del jefe y adaptarse a la demanda de mayor implicación sin caer en los errores previos. Ir a trabajar dejará de ser un suplicio para convertirse en una experiencia vital interesante y repleta de beneficios.

Cómo atajar los problemas laborales

Como puede deducirse, resulta imprescindible contar con expertos en esta terapia que tengan la cualificación necesaria para sacarle su máximo partido. Es el caso de Carles Roger, especialista en la materia que puede contribuir a analizar cada caso de forma personalizada y descubrir cuáles son los recursos disponibles para disfrutar de mejoras profesionales y de una actividad laboral mucho más llevadera.

Durante las sesiones se conversará con cada persona para analizar tres áreas de vital importancia. La primera es la pertenencia a la familia en términos de apoyo emocional y de empatía. La segunda es el papel de la persona en la jerarquía familiar. Cada persona tiene un puesto en la familia que ha de desempeñar. No es adecuado ocupar el espacio de otra persona para cargarse de responsabilidades ajenas. Por último, se trabaja en si se da lo mismo que se recibe y en los secretos familiares de lo que nadie habla y que terminan minando la estabilidad mental.

Todo lo anterior favorece que los problemas laborales se vean desde otro punto de vista y que su superación sea un proceso mucho más asequible. Dar el paso hacia la resolución de los conflictos es sinónimo de comenzar una etapa más estable y optimista.