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coaching sistemico para volver a la rutina

Afrontar la vuelta a la rutina tras las vacaciones produce emociones encontradas. Algunas personas renuevan sus objetivos personales y se enfocan hacia ellos. Otras, se frustran y sienten rechazo, estrés y bloqueo ante las nuevas cargas laborales que deben afrontar.

En vacaciones estamos tranquilos, relajados, alegres… pero la sensación de desánimo, desconexión y ansiedad aparece cuando se terminan. Para evitar que volver a trabajar nos desequilibre, tenemos que prepararnos mental y emocionalmente. Si tenemos claridad mental, un propósito cierto y trabajamos las herramientas adecuadas, volveremos con mayor conciencia y serenidad. Así, el regreso dejará de ser traumático y se convertirá en satisfactorio. 

El coaching sistémico y algunas estrategias prácticas son la mejor compañía en este proceso de vuelta al trabajo. En este artículo, pongo mis conocimientos a disposición de cada lector, sobre como el coaching sistémico puede ser una gran ayuda en este momento del año.

La preparación emocional desde el coaching sistémico

Según el coaching sistémico, nuestras emociones están profundamente influenciadas por los sistemas de los que formamos parte: familia, pareja, entorno laboral, círculo de amistades. Es decir, no surgen de la nada. Entender cómo interactuamos dentro de estos sistemas nos ayuda a tomar conciencia de los patrones que afectan nuestro equilibrio interno.

Por eso, antes de regresar al trabajo, es un buen momento para plantearse preguntas sistémicas que permiten reenfocar el rol y la identidad, así como combatir el síndrome postvacacional:

  • ¿Qué parte de mí necesita ser vista y escuchada al volver?
  • ¿A quién estoy representando en mi actitud hacia el trabajo?
  • ¿Qué patrones familiares repito en mi forma de gestionar el estrés?

La praxis conlleva abrir la mente a una nueva mirada. No es un ejercicio que busque respuestas rápidas o improvisadas, sino una toma de conciencia y un posicionamiento personales reflexionados e integrales. Si lo haces, volverás al trabajo mucho más alineado con tu interior. 

Reconocer nuestros vínculos e identificar cómo afectan a nuestro estado emocional es fundamental. La primera consecuencia es que tomaremos mejores decisiones sobre los límites que nos marcamos, la gestión de nuestro tiempo y qué prioridades nos fijamos.

La vuelta a la rutina: estrategias para un regreso sereno

La irritabilidad, la fatiga y la falta de concentración son las consecuencias negativas de volver al trabajo sin transición, de un modo apresurado y falto de planificación. Para evitarlo, lo mejor es recuperar la cotidianidad poco a poco, dando pasos chiquititos. 

El cerebro humano se siente mejor en lo gradual, lo cambios bruscos lo perturban. Por eso, siempre que sea posible, deberías usar a estas pautas gradualmente:

  1. Ajustamos nuestros ritmos de sueño. Durante los días previos, acuéstate y levántate a la hora en que irás a trabajar. Al ejercitarte, acostumbras tu reloj biológico sin sobresaltos.
  2. Rediseñamos nuestros hábitos diarios. Vamos a evitar intentar hacer todo de golpe, tenemos que empezar por dar prioridad a las rutinas que nos hacen sentir controlados. Entre ellas, alimentarnos bien, hacer pausas activas, establecer y respetar un cierto tiempo de desconexión digital, etc.
  3. Nos marcamos metas realistas. Empieza por lo esencial poquito a poco. ¡No pretendas abordar grandes tareas desde el primer día! Es importante tener la oportunidad de sentir ese avance progresivo, porque reduce la ansiedad y refuerza la motivación.
  4. Celebramos los micrologros. Todo es importante y nada es prescindible. Cada esfuerzo diario forma parte del necesario proceso de adaptación. No pretendas logros perfectos, solo es preciso que sean sostenibles.

Al volver a trabajar tras las vacaciones, ¿cuál es la principal diferencia entre una adaptación armoniosa y un colapso emocional evitable? En todo caso, volver de forma consciente, lo que siempre requiere haber dedicado tiempo a conseguirlo antes del regreso.

Ahora, ya sabes que cómo evitar el estrés durante la vuelta a la rutina. Soy Carles Roger, especialista en coaching sistémico. Volver a trabajar ha de ser, siempre, un reencuentro con uno mismo que fortalece tu identidad y cuida tus vínculos. Puede ayudar a planificar tu vuelta a la rutina si te sientes abrumado, ¡contacta ahora conmigo!

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