Imagina una situación que hayas vivido y que no llegaste a comprender. El porqué de aquella reacción de una persona o personas, o la tuya misma, o no consigues dar con la tecla deseada por mucho que lo intentas.
Imagina ahora que pudieras llevar en tu bolsillo unas “gafas especiales”, unas gafas de mirada sistémica. Estas gafas si te las pusieras en la misma situación que has pensado antes te proporcionarían información que a simple vista no podemos ver pero que explican el porqué de las reacciones de las personas (acción u omisión).
¿Verdad que si tuvieras esta información comprenderías y quizás actuarías de forma distinta?
El coaching sistémico trabaja precisamente esto.
A partir de los principios sistémicos de pertenencia, orden y equilibrio de dar y tomar deshacemos los nudos que nos imposibilitan, nos debilitan o nos exceden.
Trabajo con diferentes herramientas y metodologías: individual o grupal, con configuraciones sistémicas o con elementos como maderas y muñecos con el fin de acompañarte en el movimiento sistémico que permita el cambio.